En el dinámico mercado de consumo mexicano, la promoción de Meses Sin Intereses o MSI se ha convertido en uno de los conceptos más seductores y, paradójicamente, un problema para la estabilidad financiera de millones de hogares. La promesa de adquirir lo que quieras, generalmente algo de un valor considerable (como productos electrónicos) sin tener que pagar intereses es muy tentadora.
Sin embargo, para el ciudadano que busca proteger sus finanzas personales y las de su familia, es muy importante ir más allá de la publicidad y comprender exactamente qué es lo que se está contratando. Los Meses Sin Intereses son una buena herramienta financiera, pero deben utilizarse correctamente para evitar caer en compras impulsivas o, peor, sobreendeudamiento.
En este artículo vamos a detallar cómo funcionan los MSI, por qué a veces pueden ser tramposos y cómo podemos asegurarnos de que los Meses Sin Intereses no debiliten nuestro patrimonio.
Tabla de contenidos
Cómo funcionan los Meses Sin Intereses
Los Meses Sin Intereses no son un descuento ni un acto de caridad por parte del banco o el comercio. Son el resultado de un acuerdo comercial complejo que involucra a tres actores principales: El comercio vendedor, el banco emisor de la tarjeta y, por supuesto, el consumidor.
Los Meses Sin Intereses, o comprar a MSI, significa que puedes dividir el monto de una compra en pagos mensuales sin intereses.
Esto puede ser muy atractivo especialmente en épocas como la actual. Sin embargo, existen ciertos detalles que debes comprender correctamente para evitar que el comercio se aproveche de ti, o peor, que tengas problemas financieros en los próximos meses.
En los MSI partimos de la premisa de que el cliente no está pagando el financiamiento, entonces, ¿quién lo paga? Casi por norma general, la tienda.
Cuando realizas una compra a MSI, el banco le paga al comercio el monto total de la venta, pero le aplica una comisión por financiamiento. Esta comisión suele oscilar en el 3% y el 10% del valor del producto. Se podría afirmar sin ningún problema que este 3%-10% son el monto equivalente a los intereses, solo que en teoría los está pagando el comercio.
La tienda acepta esta comisión por un sencillo motivo: los MSI ayudan, y mucho, a que la gente compre cosas que normalmente no compraría, especialmente ventas grandes.
¿Quién paga realmente los MSI?
Llegamos aquí a uno de los puntos más importantes del artículo: Si los intereses no desaparecen, sino que simplemente los paga el comercio al banco… ¿Qué impide que el comercio suba el precio de los productos para que la comisión la pagues tú?
Es muy probable que cuando estás realizando una compra a Meses Sin Intereses, en realidad estés pagando el costo adicional propio de la financiación, aunque no lo percibas como tal y, por supuesto, el que pague sin MSI también sea obligado a asumir el precio general.
No solo se trata del precio, ya que el banco también obtiene otra ventaja aparte de las comisiones al comercio: Existe riesgo de impago. Si no haces frente a los pagos en plazo te expones a varias situaciones desagradables.
Cuando el usuario realiza solamente el Pago Mínimo de la tarjeta o incurre en un atraso, el banco puede cancelar los Meses Sin Intereses y aplicarte la Tasa de Interés Ordinaria (40%-60% anual) sobre el saldo restante de la compra. Por ello, ten cuidado con este tipo de promociones y utilízalas solo si tienes la certeza de poder realizar los pagos mensuales dentro del plazo acordado.
El problema silencioso de los Meses Sin Intereses
Uno de los mayores problemas asociados con cualquier tipo de financiación es que, si no haces bien las cosas, puedes tener un problema de sobreendeudamiento. En el caso de los MSI el problema no suele ser el costo de una única compra, sino el efecto acumulativo de realizar distintas compras cuya magnitud no percibirás realmente hasta que pasen uno o varios meses.
La ilusión de realizar un pago mensual pequeño contribuye a que nuestro cerebro ignore la visión global. Precisamente por este motivo es importante desarrollar nuestra educación financiera, porque hay ciertos detalles sobre los que nadie nos advertirá, pero que pueden arruinarnos.
Para ilustrar mejor por qué esto se ha convertido muchas veces en un problema, veamos un ejemplo.
Ejemplo de compra a MSI con datos reales
Actualmente, en la página web de una influyente cadena de Hipermercados podemos encontrar una Tele de última generación valorada (por el hipermercado) en $12,599 pesos. Sin embargo, el precio aparece tachado y en su lugar vemos que el precio al que la venden es $11,591.
Inmediatamente debajo del precio, podemos ver que puedes comprar la Tele a MSI por un plazo de hasta 20 meses. Te dan la posibilidad de pagarla durante distintos plazos, por ejemplo, 3 meses con una cuota de $3863.69, o en el plazo más largo, $643.95 pesos al mes durante 18 meses.
Sinceramente, resulta tentador pensar que podemos tener una Tele valorada en 12,599 pesos pagando solo $643.95 al mes. El problema viene del hecho de que, durante un año y medio, es como si tus ingresos se hubiesen reducido $643.95, y si no haces frente a este pago, el monto va a ser muy superior a los $12,599 de la valoración original.
Esto no tiene por qué ser un problema, ya que la financiación es una herramienta muy útil si se utiliza de forma correcta, pero debes tener mucho cuidado con comprar a MSI no solo una tele, sino también un celular, un vuelo internacional, una computadora, etc. ¿Por qué? Porque si bien son cantidades pequeñas, los asesores coinciden en que existe una regla de oro para evitar el sobreendeudamiento, una que por desgracia la mayoría de gente no conoce.
Cómo evitar el sobreendeudamiento
El sobreendeudamiento se produce cuando tienes más deudas pendientes de las que puedes pagar. Evidentemente, cuando contraes estas deudas (casi) nunca lo haces por más dinero del que esperas ingresar. Sin embargo, no solo debes hacer frente a tus deudas: tienes que comer, pagar la renta, pagar el transporte y muchas otras cosas.
De nuevo, a todos nos cuesta mucho improvisar este tipo de operaciones, pero por suerte existe esa mencionada regla para evitar el sobreendeudamiento: Las mensualidades de tus deudas nunca deben superar el 30% de tus ingresos.
Por supuesto, es recomendable que el porcentaje esté por debajo del 30%, pero una cosa es segura: Si excedes el 30% es muy probable que cualquier imprevisto descuadre tus cuentas, dejándote sin pagar tus deudas e iniciando una situación muy problemática, en la que tus deudas no solo siguen estando ahí, sino que empiezan a crecer por encima de lo que puedes permitirte.
¿Es negativo comprar a MSI? Por supuesto que no, pero tampoco es positivo. Sencillamente, es una herramienta de financiación, y como todas las herramientas de financiación debes usarlas con inteligencia.